Soy bastante aficionada a la avena horneada. Puedes preparar bastante cantidad, porcionarla, congelarla y tenerla lista en un pis-pas para desayunos o meriendas. Además, si se prepara con avena sin gluten y con bebida vegetal es apta para celíacos y para intolerantes a la lactosa.
Curiosamente, esta es la primera receta que publico en el blog, ya que es algo que normalmente horneo por la noche, mientras estoy liada con otras cosas y que al salir del horno, dejo que se enfrie, envaso y congelo, sin prestarle mucha atención.
Las opciones de la avena horneada son casi infinitas. Admite fruta, semillas, frutos secos, chocolate... y, por supuesto, calabaza.
Ingredientes
- 150 g de copos de avena suaves
- 30 g de almendra molida (harina de almendra)
- 1 cucharadita de levadura química
- 1/2 cucharadita de canela
- 1 pizca de nuez moscada
- 1 pizca de sal
- 125 g de puré de calabaza
- 200 g de puré de manzana
- 1 huevo L
- 15 g de miel (opcional)
- 175 g de bebida de avena
- 1/2 cucharadita de esencia de vainilla
Preparación
- Combinamos los ingredientes secos en un bol: avena, almendra molida, levadura, sal, canela y nuez moscada. Reservamos.
- Mezclamos los ingredientes húmedos: huevo batido, puré de calabaza, puré de manzana, bebida de avena, miel y vainilla.
- Añadimos los ingredientes secos a los húmedos y mezclamos.
- Volcamos la masa en un molde cuadrado engrasado y ligeramente enharinado con harina de avena.
- Horneamos a 180 ºC, calor arriba y abajo, durante 35-40 minutos.
Observaciones
- La almendra molida se puede sustituir por harina de avena o por copos de avena.
- Para esta receta he utilizado un molde cuadrado de 24 cm. Se puede utilizar un molde más pequeño o uno redondo.
- Con estas cantidades salen cuatro porciones generosas u ocho más pequeñas.
- Se conserva en la nevera durante una semana. Se puede congelar y descongelar en el microondas o a temperatura ambiente envuelta en papel de cocina (para que absorba el exceso de humedad).
Fuente: adaptación de Joy Food Sunshine